Tesla Motors Inc. (TSLA) es una de las empresas más innovadoras del mundo, especializada en coches eléctricos y equipos de carga de baterías. TSLA ha supuesto un reto para la establecida industria del automóvil al ofrecer vehículos que no consumen gasolina. El CEO de TSLA, Elon Musk, pretende lanzar un modelo asequible para que el usuario medio ayude con el cambio climático.
Al precio de la acción de TSLA le afectan los ingresos de la empresa, que vienen de cambios en leyes y de la política medioambiental.
¿Qué dirige el precio de la acción de TSLA?
Como otras empresas del sector, los ingresos, resultados y precio de la acción dependen de la demanda de vehículos.
Otro factor en el precio de la acción de TSLA es el petróleo y la regulación de la industria petrolera. Si los precios del petróleo están bajos, los consumidores no comprarán coches de TSLA porque costará menos conducir un vehículo de gasolina.
Además, si hay menos regulación en la industria petrolera y más países se alejan del cambio climático, el precio de la acción de TSLA bajaría.
Como TSLA ha adquirido SolarCity Corp., que produce sistemas de energía solar, si terminan los subsidios para paneles solares, no habrá incentivo para que los consumidores los instalen en casa. Las empresas tampoco instalarían paneles solares si no hay subsidios, lo que dañaría los resultados e ingresos de TSLA. TSLA afronta riesgos empresariales y geopolíticos.
Como otras empresas del sector, TSLA afronta un riesgo macroeconómico. Si la economía global se debilita, los consumidores serán menos proclives a comprar los coches de gama alta de TSLA. TSLA afronta un riesgo de mercado: si el mercado se liquida, TSLA rendiría menos de lo esperado por su alto coeficiente beta.